copia de seguridad

martes, 30 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo trigésimo tercero: "La mayoría prefiere pagar por entretenerse que por instruirse". (Robert. A. Savage, 1933, empresario estadounidense) Intento desayunar. Saco el cartón de la nevera, me llama la atención lo curioso del abrefácil y, por aquello de hacer algo distinto a lo habitual, pienso. ¿Cómo puede hacerse rico un tío que lo único que hizo fue levantar la esquina de un cartón de zumo y pintarle unas rayitas? Los hay con suerte.
... adefesio Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

viernes, 26 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo trigésimo primero: "¿El arte de amar? Saber unir a un temperamento de vampiro la discrección de una anémona. (Emil M. Cioran, 1911 - 1995, filósofo húngaro) Aquel olor actuó como un excitante estímulo y su cuerpo respondió con una reacción inesperada. Notaba el aumento de sus palpitaciones al mismo tiempo que la respiración se le aceleraba. La tensión corporal dio lugar a un enrojecimiento de la piel que apenas pudo percibir debido a la intensa dilatación de sus pupilas; en cambio, si se le reveló la rigidez muscular de su rostro cuando las sensaciones se difundieron por todo su cuerpo. Calmada esta fase, la relajación que experimentó le hizo sentirse como en el paraíso. Pero no, no había alcanzado ese idílico lugar, simplemente había sentido un orgasmo. Aquí un post postconceptual, aquí un peluche. ... más "historias extra-ordinarias" todos los días Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

jueves, 25 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo trigésimo: "La mitad de la belleza depende del paisaje, y la otra mitad del hombre que lo mira". (Lin Yutang, 1895-1976; escritor chino) Idea/aviso al Ministerio de Igual-dá: debería de ponerse manos a la obra para promover con carácter de urgencia (por realdecreto o por lo que sea) medidas que homologuen las actitudes y comportamientos durante el visionado en grupo de las películas... llamémoslas X. En pocas situaciones se produce un desigualdad tan brutal entre hombres y mujeres como en estas circunstancias. Independientemente de la calidad del guión, de la interpretación de los actores o del alto presupuesto del vestuario, cuando son varios los tíos que están viendo semejante acontecimiento cinematográfico, los comentarios más habituales serán del tipo: “¿Pero cooooño.. eso se puede hacerrrrr?”. “Huyyyy, voy a decírselo a la mariajesús a ver si se anima que a ella por ahí no le entra ni el bigote una gamba” (por cierto... ¿cuántos bigotes le entrarán a él?), seguido de unas cuantas risotadas, un gracioso apostillando que sí, que es verdad, que a la suya por ahí no le entra ni un pedo a martillazos, algún que otro berrido, y los habituales y discretos -a la par que elegantes- comentarios sobre los (dos) apéndices mamarios de las artistas en pantalla. La parte intelectual la suele poner el enterado de turno (en estas tertulias siempre hay un enterado de turno) que no sólo dice haber visto la película cinco veces, sino que él –faltaría- ya ha hecho lo mismo que se ve en cada escena mucho antes de que la rodaran... y con tías mucho mejores. Completa el panorama uno al que llaman el tímido porque siempre se tapa con el cojín (¿por qué se llamará cojín si siempre es más grande que un cojón?) no sea que cuando salga el policía se empiece a fijar demasiado en su porra, sus “amigos” se den cuenta y tenga que ponerse a redecorar su vida. En cambio, si son ellas las que se reúnen a contemplar el evento cultural, sus comentarios van a ser completamente distintos. Primero, nada de enteradas. Ninguna de ellas, por más progre, moderna o viajada que sea la habrá visto antes. Además, y como mujeres que son, hacen honor al alma y a la sensibilidad femenina y se van más al detalle. “Tía, ¿pero has visto como le cuelgan los pellejos del brazo? Aaaanda ya, si tiene hasta estrías”. “Y yo no sé como puede hacer todo eso con esos taconazos, tía... estoy segura que no llega al metroymedio, que en estas cosas engañan mucho”. “Pues lo de él no sé, pero lo de ella es operado fijo, ¡qué fuerte!, pero si se le nota a la legua, tía.” Fase que suele acabar cuando todas ellas se ponen de acuerdo en una cosa: “claro, tías, es que con ese maquillaje hasta yo estoy buena” (por cierto, que alguien debería de decirles a las mujeres en general que el maquillaje... maquilla, punto), verdad absoluta (lo de que ellas también estarían buenas) que es compartida y celebrada ¡de forma sincera! (algo que aún estudian los científicos del mundo) por todas las presentes, y que da paso a una segunda tanda de comentarios, que, siguiendo con el alma y la sensibilidad femenina, se centrarán en mostrar su solidaridad con las personas –mujeres- de su mismo sexo: “La muy zorra , pues más le valdría que estuviera fregando.”. “Di que sí, que se gana dinero así muy fácil, pero habría que verla trabajando...”. ”Ya te digo...eso lo podemos hacer todas y mucho mejor pero hay que tener un poco de dignidad”. “Mírala, pero si le está gustando.. yaaaaa, esta seguro que nació en la calle Zorrilla, luego dicen que tal la muyyy...” O una que nunca he entendido muy bien pero que es de las pocas que no suelen faltar: “Pero... tú has visto la pinta de guarra que tiene la tía”. A verrrrr, es una peliporno.. qué quieren... que las vistan de lagarteranas? Mañana más. Espero. ... perros y gatos Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

miércoles, 24 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo vigésimo noveno: "No soy nada. Nunca seré nada. No puedo querer ser nada. Esto aparte, tengo en mí todos los sueños del mundo" (Fernando Pessoa, 1888 - 1935; escritor portugués)

En 1974, el doctor Herbert Freudemberg, psiquiatra en una clínica para toxicómanos en Nueva York, observó que, al cabo de un año, todos los voluntarios que trabajaban con él perdían energía y se desmotivaban en el trabajo, sufrían ansiedad y aumentaban su agresividad frente a los pacientes. Freudemberg se dio cuenta de que algo pasaba, pero fue la psicóloga Cristina Maslach la que dio nombre a la patología. Nacía así el síndrome de burnout (quemado) o de la sobrecarga emocional, un estado psicológico que provoca agotamiento emocional en el empleado, desarrollo de actitudes negativas en el trabajo, sensación de falta de realización personal y síntomas físicos como estrés, cansancio o malestar.

Las estadísticas dicen que lo sufre un dos por ciento de la población en España, (especialmente frecuente es en la sanidad y la enseñanza) pero los especialistas aseguran que son muchos más: el 15 por ciento de las consultas clínicas por enfermedades laborales tienen que ver con este síndrome.

Y a ese porcentaje habría que sumar a todos los que padeciéndolo (y en un estadio avanzado) , estamos sin diagnosticar. Todavía.

...hospitalidad generosa

Todos los "capítulos" de " tantos hombres y tan poco tiempo"

martes, 23 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo vigésimo octavo: “No hagas hoy lo que puedas dejar de hacer también mañana. (Fernando Pessoa, 1888 - 1935; escritor portugués) Nunca me han caído bien los franceses. Un pueblo que inventó el francés, pero que lo habla más que de lo que lo practica, no puede ser muy de fiar. Si a eso añadimos que su monumento nacional es la Torre Eiffel, una torre que, la mires por donde la mires, sólo es importante por ser grande... porque, a ver, no nos engañemos. ¿qué sería la Torre Eiffel si fuese más pequeña... pues un simple andamio. Aunque si algo retrata el carácter de este pueblo son algunas de las palabras que usan. Por ejemplo, al retrete (meadero) le llaman toilette... bien. Pero ¿ y qué ponen los franceses en sus frascos de colonia?... Eau de toilette. Así, dejando claro su contenido. Al menos no engañan a nadie. Necesito vacaciones ya. ... te tocó la china Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

lunes, 22 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo vigésimo séptimo: “Para abrir nuevos caminos, hay que inventar; experimentar; crecer, correr riesgos, romper las reglas, equivocarse… y divertirse” (Mary Lou Cook, 1918; educadora estadounidense) Basta que tengas hambre para que no te ofrezcan. Pasas tres veces lanzando miradas indirectas y nada. Cambias de táctica. Vuelves a pasar y decides pararte descaradamente delante de la bandeja. Entonces ya no les queda más remedio, ponen su mejor y más forzada sonrisa y te sueltan, muy metidas en el personaje ellas (como si se hubieran pasado media vida haciendo un curso avanzado de método Stanislanski) : “Señor, desea probar nuestro paté a las finas hierbas con aroma de estragón que esta semana tenemos en oferta para nuestros distinguidos clientes?”. Y vas tú, alargas la mano suavemente, coges un trocito de pan (que visto el tamaño no sabes si es pan o una lengua de canario), con su motita de paté encima y te lo llevas a la boca... mientras buscas con la mirada a la de los zumos, (porque siempre hay una que da zumo en microminivasos) por si se hiciera necesario para pasar aquello. Vale, lo sé, se trata de una degustación y no digo yo que tengan que poner cantidades (que entonces, tal y como está la cosa, más de una familia iba a celebrar el cumpleaños de la mariajesús –piñata incluida- en un pasillo del carrefour, que nos conocemos) pero hombre.. una cosa decente si que podrían ¿no? El caso es que de primeras piensas: ¡serán tacañas y roñosas las tías!, !pero si la comida no es suya, si no la han pagado ellas! Pero claro, luego, mientras buscas el suavizante con olor al jabón de Marsella con toques aromáticos de pino salvaje, reflexionas. Y es ahí cuando empiezas a entender que pasarse diez horas vestida de Heidi (por cierto ¿cómo podía estar esta chica, la Heidi digo, tan gorda si se pasaba el día corriendo?) ofreciendo paté no hay dinero que lo amortice, y que por eso, pobrecitas mías, quieren tener un valor añadido y se llevan las muestras que le sobran a su casa en un tuper. Y cuantas más les sobren pues mejor. Oye, que a lo mejor hasta tienen para toda la semana. ... faldellines Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

viernes, 19 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo vigésimo sexto: "Luego que has soltado una palabra, ésta te domina; pero mientras no la has soltado eres su dominador" (Proverbio árabe) Nombres propios aparte (de esos cariñosos que sólo uno conoce porque sólo uno es su usuario), en España se dice follar, hacer el amor, echar un quiqui, cardar, tricotar, joder, meterla, empujar, echar un polvo, echar un casquete, echar un caliqueño, chingar, mojar, tirárselo, jincar, echar un clavo, foquinfoquin, ñikiñiki, ñacañaca, cepillarse a alguien, pasarse por la piedra a alguien, pasar a alguien por las armas, ensartar, bombear, clavársela. En El Salvador: chimar, volar capirucho. En Chile: afilar, tirar, cacheteo, echar una cacha, cachar, enterrar el pico, culiar, botar el diente de leche. En Cuba: singar, quimbar, pingar, dar candela, meter. En Argentina: fifar, coger, poronguear o reporonguear, cajetear o recajetear, garchar o regarchar, hacer una mineta. En Ecuador: comer, tirar. En Méjico: coger, chingar, echar mecate, echarse un palo, echar pata, paliacate, palenque, planchar, clavar, abrochar, ir a desgastar el petate, ira a la lucha superlibre a calzón, ir a la junta de consolidación. En Puerto Rico: chichar, achichar, montar la crica, chingar, foquin, meter, hundir pelos, clavar. En Venezuela: tirar, echar un polvo, coger, empujar los pelos, mojar los pelos, empreñar, entierro, singar. En Perú: cachar, chifar, comer. En Colombia: chichar, pichar, tirar, comer echar un güevo, dar clavo, castigar el boge, jaratar el boge, bolsiar, bombiar, dar muerte, echar un gallo, matar la arrechera, comer. En Republica Dominicana: Singar, raspar, pingar. En Uruguay: ensartar, fachar. La cosa que más fácil se puede pedir (otra cosa es que se consiga) en cualquier lugar del mundo y sin necesidad de usar ni una sola palabra (un simple gesto basta y sobra), resulta que es una de esas cosas que más palabras diferentes tiene. Tantos nombres y tan pocas veces...
... más "historias extra-ordinarias" Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

jueves, 18 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo vigésimo quinto: “Busque, compare, y si encuentra algo mejor… cómprelo” (Manuel Luque, 1947; empresario español). Hablábamos la semana pasada de sumarle una horitas más a cada jornada que nos aliviara de la angustiosa falta de tiempo. Luego lo pienso mejor y a lo mejor (seguro) la cosa es más una cuestión de calidad que de cantidad. ¿De qué servirían más horas al día si al final, y a fuerza de querer rentabilizar el tiempo extra, íbamos a estar más esclavizados con él? Es verdad que estamos perdiendo la carrera del tiempo, pero no por falta de velocidad sino por error en la dirección. Vamos en sentido contrario a lo que deberíamos. La propia demanda de bienestar se ha vuelto tan compleja y sofisticada que satisfacerla nos obliga a perseguir las manillas del reloj de forma compulsiva. Es como si para contemplar el atardecer, en lugar de sentarnos simplemente en la hierba, mirar y disfrutar del momento, necesitáramos disponer de un asiento anatómico, sentir una capa de tupido césped bajo nuestros pies y contar con un reloj de alta precisión para calcular bien una hora que no podríamos dejar de mirar. ¿Seríamos capaces de caminar al paso de un niño y pararnos a contemplar con él una fila de hormigas sin pensar que estamos perdiendo el tiempo? No se trata de tener más, al fin y al cabo hay el que hay, se trata de usarlo mejor. Si queremos ganar la carrera al tiempo tendremos que empezar a aprender a perderlo. ... matemáticas peligrosas Todos los "capítulos" de " tantos hombres y tan poco tiempo"

miércoles, 17 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo vigésimo cuarto: "El cerebro es un órgano maravilloso. Comienza a trabajar nada más levantarnos y no deja de funcionar hasta entrar en la oficina". (Robert Lee Frost, 1874-1963; poeta estadounidense) Rectificar es de sabios. Me lo comenta un amigo que lo ha visto en un programa de la tele y no tengo más remedio que darle la razón. Tantos años despotricando contra todo lo que tenga que ver –aunque sea remotamente- con el trabajo y resulta que sí, que hay empleos a los que no sólo puedes ir feliz y contento sino que, una vez allí, hasta te esfuerzas por hacer que tu trabajo acabe siendo un trabajo productivo y bien hecho. Y no sólo eso, la cosa llega hasta tal punto que (y nunca, ni en mis peores pesadillas, pensé que fuera a decir esto) entiendes el pluriempleo como una opción complementaria y hasta (¡ayyyyy cómo traiciono mis principios más sólidos!) aceptable... porque después de uno hasta te apetece salir corriendo al otro. Director de casting de película porno por la mañana y donante de esperma en un banco de semen por la tarde. Por ejemplo. Por cierto, parece mentira que trabajos tan relacionados lleguen a ser tan distintos. Bien está ser donante en un banco de semen, pero que chungo lo deben de tener los que allí trabajen viendo como pagan a todo el que llega por algo que ellos suelen hacer gratis en su casa (o donde les pille, pobrecitos míos) día sí y día también.
... pulverizadoras bucales Todos los "capítulos" de " tantos hombres y tan poco tiempo"

martes, 16 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo vigésimo tercero: "Sólo podemos dar una opinión imparcial sobre las cosas que no nos interesan; sin duda por eso mismo las opiniones imparciales carecen siempre de valor" (Oscar Wilde. 1854 - 1900; escritor irlandés) Si hay habido una necesidad, más allá de las fisiológicas básicas, que haya preocupado al ser humano (especialmente al ser humano mujer), ha sido la de poder controlar su natalidad. La cosa viene de largo. En el antiguo Egipto (ni tan siquiera yo había nacido entonces) se usaba mezclas de estiércol de cocodrilo y miel, o esponjas impregnadas en la vinagre que se introducían en la vagina para impedirles a los espermatozoides alcanzar su objetivo. La cosa siguió avanzando (¿nadie pensó, por ejemplo, en esterilizar a las cigüeñas?), hasta que llegó la revolución cuando en mayo de 1960 se aprobaba el primer anticonceptivo oral, el Enovid, mezcla de progesterona y estrógeno, y que garantizaba, con todos sus defectos, el control de la natalidad por parte de las mujeres. Desde entonces, y hasta lo último que se está probando (un chip -igualito, igualito que el que se coloca en el cuello del perro- puesto en el brazo de la mujer), todo ha avanzado bajo el mismo supuesto: intentar engañar al cerebro y hacerle creer que el feto está alojado en el útero para que no se produzca la ovulación. Lejos quedan hoy consejos como los que, en 1850 ( tampoco hace tanto) daba el científico británico Thomas Ewel. Muy original y seguro él, recomendaba a las parejas que no quisieran tener hijos, sumergirse en grandes tinajas llenas de ácido carbónico mientras realizaran el coito. Mano de santo. Para gustos... ... no se puede ser tan bueno Todos los "capítulos" de " tantos hombres y tan poco tiempo"

lunes, 15 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo vigésimo segundo: “Hay una gran fuerza escondida en una dulce orden” (Proverbio romano) No sé para qué sirven tantos masteres sobre habilidades directivas, tantos módulos de motivaciones y liderazgos o tantos cursos sobre aprenda a ser jefe en un fin de semana, cuando todos sabemos que la única manera para que el gilipollas de turno que nos ha tocado como compañero de departamento haga su trabajo es empezar la frase diciéndole “a que no tiene cojones de...” Mano de santo.
... tertulianos Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

viernes, 12 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo vigésimo primero: "La distinción que encontramos en el infortunio es tan grande que si le decimos a alguien: "!Pero que feliz es usted", por lo general protesta". (Friedrich Nietzsche, 1844 - 1900; filósofo alemán) En muchos tratados sobre el asunto se habla del labio superior de la mujer como una de sus zonas más erógenas. Incluso se hace referencia a cierto canal nervioso que lo une directamente con el clítoris. Hasta en el kamasutra se detalla lo extremadamente placentero que puede resultar un beso en el que el hombre estimula el labio superior de su compañera, mordiéndolo y succionándolo levemente mientras ella juega con el labio inferior de él. No, si por algo el hombre es el animal más besucón del mundo. Con diferencia. Y eso que no siempre ha sido así. El beso, tal y como lo entendemos ahora, no formó parte del cortejo amoroso hasta el renacimiento, y no sería hasta varios siglos después, en la década de los treinta del siglo XX, cuando se empezó a extender a partir de una comunidad, la de Maraichin, en Bretaña. Porque antes la historia era muy otra. Había quienes lo ignoraban completamente, como los egipcios (por lo que se puede deducir que entre los tipos de fluidos que intercambiaban Marco Antonio y Cleopatra no estaba precisamente la saliva) hasta quien le sacaba unos usos bastante menos lúbricos. Así, mientras en la antigua Grecia las mujeres comprobaban con un beso de tornillo si sus maridos se habían pasado por la taberna del ágora antes de llegar a casa, los indios de Tierra de Fuego, que desconocían el vaso, usaban el beso para beber, pasándose el agua de unos a otros. Mira si no podían haber aprovechado el tema ya metidos en harina. Para que luego digan que los antiguos no eran raros. ... más "historias extra-ordinarias" Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

miércoles, 10 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo vigésimo: “Conócete, acéptate, supérate” (San Agustín, 354 - 430; monje católico) Será que el día no acompaña (aunque mañana sea fiesta me toca estar aquí el viernes), pero ando un poco desarreglado pensando en si tendrá alguna relación que Diógenes, que acostumbraba a comer, defecar y masturbarse en la plaza pública, viviera hasta los 89 años en una época en la que la esperanza de vida no llegaba ni a la tercera parte. Lo digo porque si la hay, creo que debería de ponerme manos a la obra cuanto antes. No tengo ya edad para perder el tiempo.
... más "historias extra-ordinarias" todos los días Todos los "capítulos" de " tantos hombres y tan poco tiempo"

martes, 9 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo decimonoveno: “Amor: un juego en el cual hay dos que pierden, el hombre y la mujer; y uno sólo que gana: la especie" (Abate Prévost, 1697-1763; escritor francés) En la primera cafetería que se inauguró en Londres, a finales del siglo XVII, había un cartel que decía: “!Esta bebida vivifica el espíritu y alegra el corazón. Es muy buena para algunas enfermedades de los ojos, suprime vapores y jaquecas, preserva de la tisis y de la tos pulmonar. Es excelente para curar la hidropesía, la gota, el escorbuto, el tedio, la hipocondría, impide el aborto, no es laxante ni astringente...” El local nunca estuvo vacío. Los tiempos han cambiado y los métodos de meterse cafeína en vena también. El nuevo “invento”, anunciado como una ayudita para quienes no logran espabilarse por las mañanas, se llama Shower Shock Caffeinated Soap y no es otra cosa que un jabón con cafeína. Su prospecto dice que cada pastilla contiene el equivalente de 12 tazas de café con 200 miligramos de cafeína por taza. Así, cuando uno se ducha con él recibe -a través de la piel- una dosis de cafeína equivalente a un café que, si bien no se acercaría al primero que me tomo cada mañana (en el que por su densidad puede mantenerse la cuchara de pie sin problemas) sí podría considerarse bastante cargado. No es que vaya a renegar de las imprescindibles tazas diarias, pero pienso probarlo en cuanto pueda, que cualquier ayuda para ponerse en marcha es poca. Y algunos días, más. ... destilar Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

lunes, 8 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo decimoctavo: "El tiempo de la reflexión es una economía de tiempo" (Publio Siro, 85 a. C. - 43 a. C.; escritor latino) Franklin, el inventor del pararrayos, estimó que, tal como avanzaba la técnica, a finales del siglo XX se trabajaría sólo tres horas semanales. El resto sería tiempo libre. Visión de futuro que tenía el buen hombre. Resulta que ahora vivimos más años, la tecnología nos ayuda, hasta tenemos más días de vacaciones; nunca antes habíamos podido disfrutar de tanta dosis de vida. Sin embargo, parece que nuestros deseos crecen con mayor rapidez que el tiempo que tenemos para satisfacerlos y cada vez nos ahogamos más en la sensación de su falta. O alguien se pone a hacer lo que “El vendedor del tiempo”, cuyo protagonista vendía minutos envasados, o, sin esperar mucho más, que se reúnan los jefes que se tengan que reunir y establezcan algún tipo de decreto para que cada día dure más horas. Con las 24 de ahora no nos llega. ... nudo gordiano Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

viernes, 5 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo decimoséptimo: "El placer no es sino la felicidad de una parte del cuerpo".(Joseph Joubert (Montignac, 1754 - 1824; ensayista francés) Aunque todavía con bastantes reservas, las cosas del coiteo y sus accesorios han dejado de ser (por suerte) ese hilo musical que todos oíamos pero pocos escuchaban, para convertirse en esas canciones de moda que la mayoría no sólo nos sabemos sino que estamos dispuestos a cantarlas en cualquier karaoke. Una lista de éxitos que, por cierto, van ganando las mujeres. Sólo hace falta ver la cantidad de artilugios que en estos últimos años tienen a su disposición para disfrutar de ese abecedario de puntos en que los estudiosos del tema han convertido el cuerpo femenino. Pero poco a poco los hombres también van dando sus pasitos. Y eso que, ya ves tú que caprichosa es la naturaleza, el único punto confirmado de placer en los varones (fuera de los circuitos habituales) parece que reside (al menos hasta nueva orden) en la próstata, una zona del cuerpo en la que la mayoría sólo ha recibido estímulo gracias a algún examen médico, y a la que, casualmente, sólo se llega atravesando algo tan mal visto de atravesar por la gran mayoría de machos (ibéricos y foráneos) como es el ano. Dentro de la escasa juguetería masculina que hay, acaba de salir el Aneros, un masajeador prostático diseñado mediante complicados estudios médicos (antes se decía con tecnologíadelanasa pero ahora la frase está de capa caída) y que su folleto define como “una simple pieza delgada de plástico duro, con forma de y griega (para masajear también el perineo y el esfínter) que funciona con autopropulsión, es decir, introduciendo el extremo más largo en el cuerpo. Con los movimientos pélvicos propios del coito se consigue estimular la próstata, siendo el propio cuerpo quien regule la potencia y así proporcionar potentes y prolongados orgasmos no eyaculatorios que no son posibles de conseguir mediante las técnicas sensuales habituales.” Prometedor. Muy prometedor. Y no sólo porque esté diseñado para usarlo en compañía, sino porque también lo está para conseguir “placer”... que lo del “consuelo” queda mucho mejor si lo dejamos para los entierros. ... más "historias extra-ordinarias" Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

jueves, 4 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo decimosexto: "La diferencia que hay entre una convicción y un prejuicio es que una convicción podemos explicarla sin alterarnos". (Federico Guillermo II, 1744 - 1797; cuarto rey de Prusia) Las mujeres solas viajan acompañadas. Como sus amigas del alma suelen tener ya pareja buscan, para compartir el veraneo, algún alma en pena que les acompañe. Y ahí está, siempre disponible, esa chica feucha y con pinta de desvalida (todas las oficinas tienen su feucha con pinta de desvalida), en la que nunca se había fijado salvo para admirar alguna que otra vez su mal gusto vistiendo y que pasa a ser la compañera ideal de vacaciones. Porque, aunque la extra apenas llegue para una casa rural en Los Monegros, cualquier cosa antes que piensen no es una chica cosmoindependiente con todo bajo control. Hasta marcharse con la feucha con pinta de desvalida dejando bien claro que lo de la circunstancial compañía, aparte del original toque Telma&Louise, es cosa de la crisis... y de lo que uno se ahorra si viaja en habitación doble. Pero resulta que la colega, además de feucha y con pinta de desvalida, es más rara que un ratón colorao. Aparte de no soltar un duro y de pensar que las pinzas de depilar son un arma de destrucción masiva que acabará dañando la capa de ozono, su tema de conversación se reduce a cómo abrir el quinto chacra en la tercera reencarnación, y su idea de una noche peligrosa consiste en ponerle queso fundido al sándwich vegetariano del bar del hotel (¿hay algo más deprimente que un bar de hotel?.... Pues sí, un bar de hotel con alguien en el piano tocando el humo ciega tus ojos). Al final, como cada año, termina pensando que la única solución para viajar sin sobresaltos no es hacerlo con una pareja sino hacerlo con la pareja. Y que mientras tanto, visto el patio, meter la cabeza en la nevera no es una solución tan mala. Cosa de la crisis... y de lo que uno se ahorra por no tener pareja. Para que luego digan que vivir solo no tiene grandes ventajas. ... picaduras defensivas Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

miércoles, 3 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo decimoquinto: “La consecuencia de no pertenecer a ningún partido será que los molestaré a todos. (Lord Byron, 1788-1824; poeta británico) Mitin electoral, elecciones europeas 2009. Música, banderitas, entusiasmo. Empieza a hablar el candidato. En un lenguaje claro y directo va desgranado paso a paso los problemas que -de verdad- nos preocupan a todos, dejando una gran parte de su discurso para enumerar, de la misma forma clara y directa, las propuestas para solucionarlos. "Queridos compañeros: la realización de las premisas del programa, nos obliga a un exhaustivo análisis de las condiciones financieras y administrativas existentes. Dados los condicionamientos actuales, la complejidad de los estudios cumplen un rol esencial en la formación de las directivas de desarrollo para el futuro. Así mismo, y ante el aumento constante, en cantidad, calidad y extensión de nuestra actividad, exige la valentía y la determinación del sistema de participación general. Sin embargo, no hemos de olvidar que la estructura actual de la organización ayuda a la preparación y a la realización de las actitudes de los miembros hacia sus deberes ineludibles. De igual manera, el nuevo modelo de actividad de la organización garantiza la preparación de un grupo importante en la formación de nuevas proposiciones. No es indispensable argumentar el peso y la significación de estos problemas, ya que el desarrollo continuo de distintas formas de actividad cumple deberes importantes en la determinación de las directrices educativas en el sentido del progreso. La práctica de la vida cotidiana prueba que nuestra actividad de información y propaganda facilita la creación del sistema de formación de cuadros que corresponden a las necesidades. El afán de organización, sobre todo la consulta a los numerosa militantes, ofrece un ensayo interesante de verificación del modelos de desarrollo. Los superiores principios ideológicos condicionan que el inicio de la acción general de formación de las actitudes, implica el proceso de reestructuración y de modernización de las formas de acción. Incuso bien pudiéramos atrevernos a sugerir que un relanzamiento especifico en todos los sectores implicados habrá de significar un auténtico y eficaz punto de partida de las premisas adoptadas. Es obvio señalar que la superación de las experiencias permite, en todo caso, explicar las razones fundamentales de toda la casuistica de amplio espectro. Pero pecaríamos de insinceros si soslayásemos que una aplicación indiscriminada de los factores concluyentes asegura en todo caso un proceso muy sensible de inversión de los elementos generadores. Por último, y como definitivo elemento esclarecedor, cabe añadir que el proceso consensuado de unas y otras implicaciones concurrentes, deriva de una directa incidencia superadora de toda una serie de criterios ideológicamente sistematizados en un frente común". Dicho lo cual, y una vez enterado de sus programas (que tan perfectamente están resumidos en el discurso), el próximo domingo, día en que lagranfiestadelademocracia vuelve a visitarnos en forma de participación ciudadana y bla, bla, bla.. (meabuuuuuuuurrro), resulta que servidor tiene un bautizo. ¡La pena que me va a dar no poder darles mi humilde voto a estos señores que dicen estas cosas tan bien dichas... buffffffff! ... pero antes es la obligación que la devoción. Otra vez será. Seguro que cualquier lustro de estos las ranas crían pelo.
... haciendo el primo Todos los "capítulos" de " tantos hombres y tan poco tiempo"

martes, 2 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo decimocuarto: "El mundo entero se aparta cuando ve pasar a un hombre que sabe a dónde va". (Antoine de Saint-Exupery, 1900 - 1944; escritor francés) Es fácil de comprobar: cualquier conductor tarda mucho menos en aparcar si encuentra un solo sitio para hacerlo que si se tropieza de golpe con el aparcamiento medio vacío. Tomar una decisión cuesta; poder elegir implica poderse confundir, o al menos la posibilidad de no tomar la mejor, y eso, teniendo en cuenta que nos pasamos la vida dudando de todo, no deja de ser un problema. Sólo fui a comprar un simple yogur pero acabé con dolor de cabeza. Que yo recuerde -y seguro que se me olvidan unos cuantos-, había desnatados, semi-desnatados, artesanos, enriquecidos, después de la fermentación, griegos, líquidos, batidos, con trozos de frutas, con puré de frutas, con cereales, azucarados, edulcorados, más cremosos, nada cremosos, con bifidobácterias, con lactobacilus.... A ver quien es el listo que sin haber hecho un master en yogures es capaz de decidirse a la primera. No, si al final mi idea de poner unos vasitos de yogur en plan probadores al estilo de las colonias para que se puedan “probar antes de comprar” va a ser la mejor solución. Y ya de paso que lo hagan también con los hombres, nos evitaría un montón de problemas al tener que decidir entre los que hay cuando queremos quedarnos con alguno. Al fin y al cabo hay tanta variedad de ellos como de yogures. Por lo menos. ... cínicos Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

lunes, 1 de junio de 2009

Capítulo Milésimo cuadringentésimo decimotercero: "La envidia va tan flaca y amarilla porque muerde y no come" (Francisco de Quevedo, 1580 - 1645; escritor español) Primer día de junio. Lo digo con tiempo para que luego nadie diga que la sugerencia le llegó tarde. A quien corresponda: es absurdo que en navidad siempre reciban cestas aquellos que justo menos las necesitan. Cada año pasa lo mismo: cuanto más potente es alguien, más cestas le mandan y más grandes son. No es lógico. Está claro que los pobres las aprovecharíamos mucho mejor.
... una cama original Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"

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